Cuando las personas se someten a dietas para bajar de peso, los alimentos que están más restringidos son los que contienen más grasas. ¿Por qué te dicen que elimines la grasa? Sabemos que la grasa, tiene muchas calorías, pero hay otra razón y es debido a la forma en que se digiere y utiliza en nuestro cuerpo.
Cuando comemos grasa, se descompone en ácidos grasos individuales, convirtiéndose en pequeñas moléculas de grasa y proteína llamados lipoproteínas.
Estas lipoproteínas se envían al torrente sanguíneo, donde los ácidos grasos se depositan directamente en nuestras células grasas para conseguir la energía.
Cuando comemos demasiado, el exceso de carbohidratos y proteínas se convierte en depósitos de grasa almacenada.
Sin embargo, las grasas saludables y más en concreto, los ácidos grasos de cadena media como puede ser el coco, se digieren y utilizan de manera diferente. No se desgranan en lipoproteínas y no circulan en el torrente sanguíneo como otras grasas, sino que se envían directamente al hígado, donde se convierten inmediatamente en energía.
Pero a diferencia de los carbohidratos (sobre todo los refinados), que son los que solemos tomar para proporcionar la energía, los ácidos grasos de cadena media, no aumentan el azúcar en sangre, por lo que el aceite de coco es más limpio y por ejemplo es seguro para los diabéticos.
Otra diferencia es que los ácidos grasos de cadena larga presente en muchos alimentos, para ser digeridos correctamente necesitan sales biliares. Estas sales son secretadas por la vesícula. Los ácidos grasos de cadena media no necesitan estas sales, por lo que si tienes problemas de digestión o no tienes vesícula, el aceite de coco es perfecto para ti.
Muchas personas informan que el aceite de coco les ayuda a controlar los antojos de azúcar y reduce los síntomas de hipoglucemia. Así es que cuando se come aceite de coco, el cuerpo lo usa de inmediato para producir energía en lugar de almacenarlo como grasa corporal. Como consecuencia, puede comer mucho más aceite de coco que otros aceites antes de que el exceso se convierta en grasa.
Está bien documentado en numerosos estudios dietéticos, tanto en animales como en humanos, que la sustitución de los ácidos grasos de cadena larga por ácidos grasos de cadena media, da como resultado una disminución del aumento de peso corporal y una reducción de grasas en las deposiciones.
De entre todos los ácidos de cadena media: El coco es el rey por sus propiedades especiales.
Otra de las maravillas de esta grasa saludable, es que contiene grandes cantidades de Ácido Láurico; un probado antiviral, antibacteriano y antifúngico agente.
Del consumo de ácido láurico deriva en una sustancia llamada Monolaurina. Esta sustancia ayuda a defendernos contra virus, bacterias y otros patógenos y fortalece su sistema inmunológico, protegiéndolo de múltiples enfermedades. Es un ácido graso esencial que suele estar presente en la leche materna y en la alimentación, sólo puede conseguirse a través de la Mantequilla (en muy poca cantidad) o a través del aceite de coco.
Saciedad: La clave para la pérdida de peso
Cuando usas constantemente aceite de coco (junto con otras grasas saludables), este proporciona nutrición vital a cada célula de tu cuerpo, nutrición que respalda la función óptima de sus nervios, cerebro, hormonas, sistema inmunológico y metabolismo. Pero más allá de eso, desencadena un poderoso mecanismo que es la clave del éxito en la pérdida de peso permanente: la saciedad.
¿Cómo registra tu cuerpo esto?
Cuando comes aceite de coco (y otras grasas saludables como las que se encuentran en la mantequilla, nueces, carnes y huevos), tu cuerpo produce una hormona en el estómago y el intestino delgado que indica que has comido lo suficiente.
Cuando se siente saciado, desaparecen los antojos y el hambre persistente que se experimenta en la mayoría de las dietas.
Una ventaja adicional es que muchos problemas de salud se resolverán solos y tendrás más energía y una actitud más optimista ante la vida.
La saciedad es un concepto de pérdida de peso verdaderamente revolucionario. Al alimentar a tu cuerpo con las grasas saludables que necesitas, no sentirás hambre y ni siquiera querrás comer en exceso calorías vacías de alimentos como pizza, refrescos o helados.
Te dejo algunas formas de beneficiarte del aceite de coco en tu día a día:
- Aceite de coco disuelto en agua templada.
- Aceite de coco disuelto en Té/Café.
- Aceite de coco disuelto en Jugo Verde/smoothie.
- Huevos cocinados con aceite de coco.
- Aceite de coco untado en tu tostada.
- Vegetales salteados con aceite de coco.
- Mayonesa hecha con aceite de coco.
- Aderezo en ensaladas.
Además al usarlo para cocinar como aceite de base en platos calientes, en lugar de otros aceites, evitas la producción de radicales libres, ya que el aceite de coco soporta mejor que el resto de los aceites, las altas temperaturas, por lo que no se oxida tanto en el cocinado y no contribuye a oxidar nuestras células como sí hacen otros.
Pon aceite de coco en tu dieta y verás cómo cambia tu silueta!!